miércoles, 9 de julio de 2008

"ODA A LA CHANCLA"

Debo tener algo de ADN de Orzowei, (lo que también se conoce en el mundo científico como “genética atarzanada”) porque yo soy de los que muere por una chancla. Lo que más me gusta del verano es que ya se puede uno poner las chanclas hasta el mismo final de septiembre. Con la aparición de la chancla (en sus distintas modalidades; de “deíto”, de puente, tipo romana, moruna, etc) aparece ese desfile de dedos “porrúos”, que posiblemente sea el mejor pasatiempo que existe. Uno se sienta en una terraza de verano y empieza a mirarle los pies a la gente y observará que hay humanos con dedos más raros que una gallina con orejas. Los hay que tienen el dedo gordo como la cabeza de un niño de tres meses. Otros tienen unas uñas que, conveniente cortadas y talladas, servirían de mantilla para cualquier procesión de Semana Santa. Otros tienen los talones con tanta dureza que rozan un R5 y lo rayan. Lo que yo les diga, que unas chanclas entretienen tela.

La chancla mantiene el pie fresquito, no como esos tenis de La Tórtola, que cuando uno se los quitaba sentía una bofetada de uranio enriquecido con olor a queso de cabrales, con un 56 % de humedad. A mí no me gusta llamarlas chanclas, prefiero un nombre más acorde a su categoría, por ejemplo “los Adidas San Pedro” o los “Nike Ben Hur”. Las chanclas son sagradas o ¿acaso los apóstoles llevaban náuticos o botas de media caña de Valverde del Camino?. ¿Llevaba Gandhi mocasines?. ¿A qué no?. Lo dicho, de personas santas y pacíficas. Cuando vea usted a alguien con chanclas sepa que está ante una persona noble.

Ojalá el verano no acabe nunca. Chanclas, I love you.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Millones de gracias amigo. Una vez más has logrado que deje atrás las penas y me acueste con la mejor de las sonrisas después de leer tus historias.

Nunca se me habría ocurrido sentarme en una terraza a mirar las durezas y los dedos martillo, pero ahora cada vez que vea una chancla, me acordaré de ti.

Un beso enorme y repito millones de gracias por existir.

Marisa

Anónimo dijo...

ERES UN CRACK Y COMO DICE MARISA AHORA CADA VEZ QUE VEA UNA CHANCLA ME ACORDARE DE TI CON UNA SONRISA,PORQUE HAY QUE VER LO QUE ME HACES REIR,GRACIAS.

Jose Guerrero Roldan "Yuyu" dijo...

Grassias a los dos.
Para eso se creó este blog, para contar las cosas a mi manera y, se se puede, sacarle una sonrisa al personal.
Un saludo a ambos.